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REVIEW: Yakuza 0

Linkinboss

abril 12, 2017

Es difí­cil abarcar un juego de la franquicia Yakuza sin hacer alusión a la desafortunada trayectoria que ha tenido en Occidente. Entre lanzamientos retrasados por 2 a 3 años, muchos de estos juegos se vieron enfrascados en ser la última tirada de juegos de una generación pasada. Por ejemplo, Yakuza 2 llegó a occidente recién el 2008, a 2 años del lanzamiento de PlayStation 3, en una plataforma completamente muerta en el primer mundo. Sin embargo, desde que Sony decidió meter manos en el asunto y apoyar la localización de los juegos, las cosas se han visto más favorables para la franquicia. Luego de que por 3 años se diera por impensable la localización de Yakuza 5, ocurrió, aunque sólo lanzada en formato digital, casi un regalo para los fanáticos de la franquicia que ya tení­an las esperanzas por el suelo.

Sin embargo, para Sony y para Sega, la verdadera apuesta estaba en Yakuza 0, el primer juego no spin-off de la franquicia que es lanzado en PlayStation 4, y que si bien llega con poco menos de 2 años de diferencia, llega en un momento donde la consola se encuentra en plena vigencia y empezando a consolidar su catálogo de exclusivas. Además, resulta ser un juego particularmente importante porque al ser una precuela, se vuelve por defecto un nuevo punto de entrada a una franquicia que se vale mucho de la trama que intenta contar, y que con un remake del primer juego anunciado con apenas 6 meses de diferencia dan la oportunidad perfecta para capturar un público al que no habí­an podido acceder en los 12 años de existencia de la franquicia.

El juego cuenta con dos protagonistas, ambos personajes muy queridos en la franquicia: el protagonista de siempre, Kiryu Kazuma, y el carismático antagonista, Goro Majima, quien aparece por primera vez como personaje jugable en un juego no spin-off. Sin embargo, al ser una precuela, nos encontramos en el año 1988, casi 20 años antes del comienzo de la trama del primer juego. Es por esto, que Kiryu se nos presenta de manera mucho más juvenil, siendo un yakuza de bajo rango que aún lleva poco tiempo en la organización. En tanto, Majima aparece como un desterrado por desobedecer ordenes (las cuales, para no spoilear nada, fueron detalladas en algún momento de Yakuza 4), buscando poder regresar a su familia.

Ambos protagonistas se enfrentarán a tramas independientes, las cuales están intercaladas cada 2 capí­tulos lo que mantiene un cierto dinamismo a la hora de jugar. Por una parte, Kiryu es inculpado por la muerte de un civil al cual habí­a sido encomendado cobrar la deuda de un prestamista, por lo que se ve forzado a intentar limpiar su nombre e investigar el porqué de la importancia en el lugar donde transcurre el crimen. En dicho camino, debe enfrentar a la Familia Dojima, una de las más importantes dentro del clan Tojo, y quienes están llevando un proyecto para revitalizar económicamente el distrito de Kamurocho. En tanto, Majima se encuentra en Sotenbori, un distrito en Osaka, ejerciendo como manager de un cabaret bajo una estricta vigilancia, a modo de castigo por parte del lí­der de su antigua familia, Shimano.

Cabe mencionar que lo anteriormente mencionado es sólo la punta del iceberg en lo que respecta en la trama del juego, ya que a lo largo de este las cosas se irán complicando e iremos conociendo las relaciones entre los distintos personajes, y las rencillas de poder dentro del clan Tojo. Todo esto entregado a través muchí­simas cutscenes, y diálogos en tiempo real, que al menos para la trama principal se encuentran completamente doblados. Eso sí­, el juego solo dispone idioma japonés con subtí­tulos en inglés, lo que al menos en idioma original parece ser la decisión acertada, puesto que en actuación de voz, lipsync y dirección «cinematográfica» de las cutscenes, el juego no tiene que envidiar nada de los lanzamientos triple A. De hecho hace pasar vergí¼enzas a algunos.

Pero un juego no es nada sin su gameplay, y probablemente aquí­ es donde todo el mundo salta a compararlo con juegos del corte de GTA, cuando son juegos completamente distintos. Shenmue podrí­a ser un juego más cercano, pero por el ritmo y el enfasis en el combate, también guardan diferencias. El juego consiste de un modo aventura en un sandbox confinado, pero que por el sistema de guardado y lí­mite de í­tems en el inventario, es fácil de asociar a un J-RPG. En tanto, el sistema de peleas es lo más similar posible a lo que serí­a un beat em’ up en 3D, donde todo el detalle y «realismo» del juego pasa a segundo plano y nos encontramos con un sistema bastante arcade.

El sistema de peleas ha evolucionado lentamente a lo largo de la franquicia, Yakuza 0 integra algunos cambios importantes, como la inclusión de 3 estilos distintos de pelea para cada personaje, los cuales pueden ser mejorados invirtiendo dinero en ellos. Además, completando las sidequest es posible desbloquear un cuarto estilo. Cada uno de ellos cuenta con distinto rango de ataque y velocidad, así­ que aunque es posible terminar el juego utilizando un solo estilo, ayudan a la variedad y que el juego no se vuelva monótono. Los movimientos básicos, como es de esperarse son golpes, patadas, bloquear y esquivar, que podemos enlazar en algunos combos básicos, y con los desbloqueables es posible hacer counters y comebacks interesantes.

Sin embargo, lo que define el estilo de Yakuza a la hora de pelear son las Heat Actions, las cuales se realizan al cargar una barra de «super» y nos permitirán hacer maniobras especiales que causarán gran daño al oponente. Muchas de estas son desbloqueables, o pueden ser realizadas con armas, que pueden utilizarse del mismo entorno, o pueden ser compradas y asignadas desde el inventario, aunque poseen un uso muy limitado, ya que solo pueden proporcionar una cierta cantidad de golpes antes de romperse.

Con todas estas componentes, a lo largo del juego encontraremos que hay estilos de pelea que resultan más efectivos según la cantidad de enemigos en pantalla, y particularmente cuando nos enfrentemos a jefes, ya que estos usualmente son muy buenos para bloquear y contrarrestar nuestros movimientos. A pesar de ello, al menos en dificultad difí­cil (dificultad en la que probé el juego), es posible terminarlo utilizando predominantemente un solo estilo.

Fuera de las peleas nos encontramos en uno de 2 sandbox confinados en muros invisibles, los cuales se caracterizan por estar densamente poblados de NPC y locales de distinta naturaleza con los cuales podremos interactuar. Los locales se dividen en: Restaurantes, en los cuales se pueden consumir para restaurar la salud en el lugar; Tiendas, donde podremos adquirir í­tems para llevar, ya sean armas, equipamiento de defensa, comida transportable, alcohol, u otros objetos para interactuar con otros personajes; Edificios relacionados con el avance de la trama y finalmente; Edificios de entretenimiento, y aquí­ es donde se pone interesante.

Los edificios de entretenimiento son muy variados, e incluyen un gran número de minijuegos, incluyendo pool, dardos, póker, blackjack, shogi, ruleta, mahjong y juegos con dados, los cuales pueden imaginar que funcionan de forma similar a otros juegos. Pero eso solo cubre una pequeña parte de las actividades, ya que también podemos ir a una disco o al karaoke y jugar juegos de ritmo en distintas dificultades. Además, siendo un juego ubicado en los distritos rojos, no podí­a faltar la oportunidad de interactuar con mujeres, en esta oportunidad, a través de locales telefónicos donde podemos quedar para una cita y de tener éxito podemos pedir a las chicas a que nos acompañen a alguno de los minijuegos. Aunque probablemente lo que más llame la atención, sea el local de arriendo de videos para adultos, donde desbloquearemos videos a medida que colectemos unas cartas repartidas por la ciudad, y donde veremos videos bastante suaves, de ACTRICES REALES DE VIDEOS PARA ADULTOS. Si no está convencido, busque los nombres en Google.

Un punto aparte del entretenimiento, y probablemente el más entrañable, es la inclusión de juegos de arcade de la época en los salones de Club Sega, en ellos podremos jugar Super Hang On, Space Harrier, Fantasy Zone y Outrun, los cuales están completos y en los que podremos guardar los High-Score tal cual como harí­amos cuando vamos a nuestro local favorito. Todos los juegos se encuentran bien emulados y entregan múltiples alternativas de cómo se procesa y presenta la imagen.

Si todas esas actividades se hacen pocas para entretenerse a lo largo de la trama, ni tampoco las sidequest, ambos personajes cuentan con una substory. Por una parte, Kiryu deberá trabajar como un ejecutivo de bienes raí­ces, y en tanto, Maijma deberá hacerse cargo de un Hostess Club. Cada trama integra algunos elementos de gameplay, y representan una de las mejores formas de adquirir dinero en el juego.

A pesar de todo lo comentado, Yakuza 0 es un juego que tiene más de algún problema. Al ser un juego que en Japón también paso por la PS3, se nota como han envejecido sus gráficos. Además, en ciertos puntos, es difí­cil dedicar tiempo a todo el contenido adicional cuando uno está enfocado en la trama, y solo se presentan algunos momentos especí­ficos donde tenemos tiempo indefinido sin estar obligados a proseguir con la historia. Y es imposible pasar por los aspectos negativos y no mencionar a Mr. Shakedown, personaje que aparecerá aleatoriamente en las calles y si se enfrenta a nosotros y perdemos robará todo el dinero que tengamos. Eventualmente, es posible ganarle en una pelea e incluso recuperar el dinero, pero en un comienzo se hará muy tedioso lidiar con él, y probablemente lo mejor sea intentar evitarlo.

 

 

Yakuza 0 sin lugar a dudas es la entrega más sólida a la fecha en toda la franquicia, y se nota todo el amor que le puso Sega en celebrar los 10 años de Yakuza. La formula se ha mantenido relativamente inalterada desde su concepción, pero los numerosos agregados a la formula que llegan entrega a entrega le permiten mantenerse vigente. A Pesar de tener una gran cantidad de cutscenes largas, el juego también puede proveer de una entretención un poco más arcade, ya que tanto sus mini juegos como el sistema de peleas dejan claro que esto no es un simulador, es un videojuego.

El juego se vale de su personalidad. El drama, el humor y nuestros entrañables protagonistas y como se relacionan con todos los personajes de la trama definen el juego. Kamurocho, como es costumbre, literalmente se roba la pelicula, convirtiendose en esas localidades icónicas de los videojuegos a las que uno siempre añora volver. Las sidequest son simpáticas, y contienen muchos guiños a eventos que transcurren en el resto de la franquicia. Contando la mitad de las sidequest y las subtramas de los personajes, facilmente es posible obtener 60-70 horas de juego, y muchas más para quienes quieran enfrentar el «platinar» el juego. La propuesta que trae claramente es para un publico que quiera una pincelada del bajo mundo de Japón, y que esta dispuesta a lidiar con horas de contenido en japones subtitulado al inglés, que a simple vista parece ser una propuesta algo obsoleta para esta generación, y logran entregar un paquete completo que puede fácilmente entregar 60-70 horas de entretención.  Sin ser un juego perfecto, probablemente es una de las entregas más sólidas de la franquicia y un imperdible para la gente que quiere conocer de una forma muy romantizada el bajo mundo de Japón.

Review del Juego hecho en su versión de PS4 a partir de una copia digital facilitada por el publisher.

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