Granja, granja y más granja fue lo que anunciaron varias desarrolladoras en ese recordado Nintendo Direct Mini que saliera este año, generando una sobrecarga de juegos de este género, quizás (seguro) debido al éxito de Animal Crossing: New Horizons. Una de ellas, fue la reconocida desarrolladora de RPGs, Square Enix, que decidió salirse un poco de los remasters/secuelas/remakes y nos trajo una apuesta original llamada Harvestella.

La quietud y el misterio de tu origen

Harvestella te sitúa como un personaje que llega de la nada al pueblo de Lethe, y sin conocer su origen ni su destino se embarca en una aventura para resolver el misterio de la quietud, que una vez al mes azota al mundo. A lo largo del juego vamos resolviendo el misterio, y sin entrar en spoilers, este te mantiene expectante en largos tramos.

El juego basa su mundo en las estaciones y su historia al principio se basa únicamente en estas, divididas en cuatro ciudades tematicas, donde tenemos que visitarlas y ayudar al protagonista de turno para solucionar el problema que lo aqueja, con ello habremos ganado la clase del personaje en cuestión y una area nueva que explorar.

Granja más RPG de acción que van de la mano

Pero vamos a lo importante, una de las cosas que me mantenía jugando este juego, era ver si la combinación entre simular una vida en la granja e ir de aventura funcionaba. Tenía mis dudas, pero finalmente el juego me ganó, para bien…

Al principio el juego te suelta en el mapa sin nada y tú tienes que hacer lo posible para sustentarte económicamente, puedes salir de aventura y realizar las quest que te asignan, como también sólo dedicarte a sembrar cosas, cocinar, entregar pedidos y optimizar tu granja para hacerla crecer y tener una vida autosustentable. Pero yo creo que la gracia del juego y lo que lo hace durar hasta el infinito es la alternancia entre estas dos cosas.

Además de eso, todos los meses tenemos la famosa quietud, que desbloquea una mazmorra especial donde podremos encontrar items especiales que no están en ningún lado y aprovecharlos para acelerar nuestro crecimiento.

Todo esto tiene limitaciones que encuentro excelentes. Primero, estamos regidos por la duración de un día, y en base a eso tenemos que administrar lo que vamos a hacer, para que cuando queden pocas horas para el termino de este, solo tengamos que hacer ajustes finales e irnos a dormir. El último punto es importante, ya que, si no hacemos caso y llevamos al límite el tiempo de exploración, simplemente caeremos dormidos en la madrugada, y al estar lejos de casa, nos cobrarán dinero por la recuperación, y además habremos perdido valiosas horas del día siguiente.

Otra limitación menos importante, es el vigor. Cada actividad que requiera esfuerzo nos gastará vigor y cuando lleguemos a cero, no podremos hacer ninguna actividad, pero podremos solucionarlo usando los consumibles y recargando la barra de vigor, aunque sólo hasta que tengamos el estómago lleno.

Un gameplay simplista que se entiende a medida que avanzas

La jugabilidad de Harvestella es en extremo simplista, con un botón de ataque y la capacidad de lanzar especiales. La variedad radica en los jobs que puedes aprender ya que algunos son más afines para algunos enemigos mientras que otros no. En general, podría decir que comencé un poco disconforme con el gameplay, pero con el pasar de las horas entendí que la simpleza es en efecto parte de las restricciones que te pone el juego para aumentar la duración. Para ponerlo en palabras simples, las opciones defensivas casi siempre radican en los consumibles para rellenar HP en vez de la evasión, literal es atacar para generar daño sin pensar mucho en cómo lo generas ni en qué estrategia utilizas, la finalidad es ganar y como sea.

Interiorizando en las opciones defensivas, estas están limitadas por tu «estomago». Sí, no lo escribí mal, ya que cada vez que consumes algo para recuperarte, vas rellenado el estómago según lo que el item indique, y cuando llegas al tope, no podrás consumir más cosas que no sean zumos, los cuales rellenan sólo hp y no el vigor. Aunque de todas formas este último se va restaurando gradualmente, siempre y cuando tengamos algo en el estómago.

No nos olvidemos de las relaciones interpersonales

Una de las cosas que quiero agregar, pero que quiero ser escueto y dejarles la opción de descubrirlo a ustedes, es la capacidad de estrechar lazos con todos los personajes que conoces en el juego. Cada vez que le haces un favor a personajes clave, subiremos un indicador de afinidad y cuando este llegue al máximo, quien sabe…, pero en general, me gustó que tomaran esta opción tan famosa en otros juegos del mismo género, pero que no sé si está tan profundizada como en otros.

Las joyas en bruto se ven como piedras

Una de las cosas discutibles del juego es su apartado gráfico y visual, no quiero decir que sea feo, por el contrario, es muy bonito. Pero entiendo que no pueda justificar tu compra, considerando también el valor del juego y que este juego no es un AAA ni por si acaso.

Un punto positivo de este apartado, es que el ambiente se adapta a la estación de turno. Por ejemplo, con el color de las hojas en otoño o las temáticas de las ciudades del juego, donde podremos ver lugares nevados, playas, sectores acuáticos, etc… y todo esto explorable desde un mapamundi como en los RPGs más clásicos de los 90’s.

Hilando muy fino, quizás el juego está hecho así a propósito para evocar quizás lo mejor que vimos en 3DS o en una de esas estuvo pensado para switch y después se porteo a PC ya que algunos botones en PC son del layout de Switch.

La buena música viene en frasco chico

El apartado sonoro, a cargo de Go Shiina (God Eater, Kimetsu no Yaiba, Mr Driller), es increíblemente afín al juego. Mezclando unos tonos melancólicos y coloridos que suman mucho a la experiencia, siento que aportan lo que falta para darle identidad al juego y exponerlo como la joya que es. El único detalle es que, al principio, los mismos temas son utilizados muchas veces en distintos lugares lo que a algunos les puede resultar algo tedioso.

Conclusiones

En fin, Harvestella es de esos juegos que no esperaba y me sorprendieron, me resistí a entrar y ahora estoy jugando horas y horas perdido en actividades, simplemente pescando o haciendo platos para llevar al delivery. Quizás lo único que podría criticarle al juego es que, a pesar de tener todo ese contenido, no es tan profundo y eso puede espantar a los más hardcore en el género.